Los pequeños hoteles con encanto emergen en todo el territorio de la Val d’Aran, salpicado de pueblos en los que la pizarra, la piedra y la madera componen la arquitectura alpina más singular. Alojarse en refugios y antiguas bordas de la zona convertidos hoy en hoteles de montaña es una de las formas de recorrer la Val y conocer el patrimonio cultural, histórico y natural de sus pueblos.
Pueblos como Arties, repleto de casas típicamente aranesas y situado frente a la cima del Montarto, es uno de los municipios con más encanto de la zona. La Iglesia de Santa María de Arties, del siglo XII, declarada monumento histórico nacional, y los restos de la torre del castillo representan su patrimonio románico más singular. Los hoteles recomendados de la localidad son el Casa Irene y el Hotel Besiberri, muy distintos entre sí pero ideales para combinar descanso y actividades al aire libre en cualquier época del año. Los puntos fuertes del primero son su spa y la piscina climatizada, mientras que el segundo puede presumir de su cuidada decoración y de su servicio de canguro.
Hotel Besiberri |
Baquèira, por su lado, destaca como destino internacional de nieve, con sus más de 120 kilómetros de pistas de esquí. En esta zona el visitante puede alojarse en el Hotel Val de Rusa, pequeño, cálido, acogedor y con un maravilloso spa con servicio de masajes, o el hotel de cinco estrellas La Pleta by Rafael Hotels, situado en un refugio frente a la estación de esquí, que cuenta con seis tipos de habitaciones de lujo y tres exclusivos restaurantes, entre otros servicios que consiguen que la estancia sea una experiencia romántica a la par que lujosa y rodeada de naturaleza.
La localidad de Betlan, un bello pueblo rodeado de campos de cultivo y prados, cuenta con el hotel rural Tierras de Aran, que ofrece la calidez de la tradicional casa aranesa de muros de piedra e interiores de madera, además del spa. El pueblo de Betren, por su lado, es uno de los más bellos del valle por su ambiente rústico y bucólico. En él, el visitante puede alojarse en el Hotel Gran Chalet, que ofrece un ambiente familiar que combina tradición y modernidad.
Habitación de Casa Irene |
Otros municipios con encanto son Garòs, pueblo de postal donde el Garòs Ostau es la mejor opción donde alojarse; Salardú, donde es posible alojarse en Hotel Colomers, antigua cuadra reformada, o en el Hotel Mauberme; y Vielha, la capital de la Val d'Aran, que ofrece múltiples opciones de entretenimiento, alojamiento y comercio, además de varias visitas de interés cultural, como el Ayuntamiento o la Iglesia, además del Museo de la Lana o diversas casas señoriales. En el centro histórico se encuentra el Hotel El Ciervo, pequeño, de ambiente familiar y de gran encanto.
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